Uno de los beneficios más relevantes o importantes del coaching ejecutivo es el desarrollo de competencias auténticas en la visión, la gestión y el liderazgo. Para este desarrollo tenemos que ir por debajo de la superficialidad. El progreso ocurre cuando se hacen las preguntas correctas, se utiliza la experiencia para solucionar problemas reales y visibilizar oportunidades que están escondidas por debajo del iceberg.